Cavilando sobre las distintas posibilidades alimenticias del domingo se nos ocurrió improvisar esta receta. La verdad es que el título es simpático, ya que efectivamente se precisa de dos recipientes para ir cocinando los distintos ingredientes del plato. Cuando te inventas algo de comer siempre existe la incertidumbre de si gustará o acabaremos comiendo un bocadillo de queso o implorando una pizza urgente a domicilio. No obstante, en este caso, al ver la expresión de los catadores supimos que triunfamos. ¡Buff, qué alivio!.
Merluza a las dos cazuelas |
Ingredientes:
- 8 lomos de merluza (utilizamos congelados)
- 3 patatas grandes
- 5 langostinos
- 1 cebolla grandota
- 3 dientes de ajo medianos
- 1 puñadito de guisantes congelados
- Caldo de pescado (utilizamos concentrado en brick)
- Azafrán (en su defecto colorante)
- 1 y 1/2 chupitos de brandy (o whisky, lo que más nos guste)
- 1/25 vaso de vino blanco ácido, tipo Ribeiro o Albariño
- Aceite de oliva
- Harina
- Sal
PREPARACION
Dejamos descongelando en la nevera la merluza y los langostinos desde el día anterior. Al día siguiente cortamos los langostinos longitudinalmente en dos mitades, los salamos y, además, salpimentamos los lomos de merluza. Ponemos a calentar en una olla el caldo de pescado (si es concentrado añadiremos agua).
En una de las cazuelas (o sartén, da igual) freímos a fuego suave las patatas costadas en rodajas gruesas, de forma que nos queden listas par terminar de cocinarlas con el pescado, en plan patatas panaderas. Escurrimos y reservamos. En otra cazuela con aceite limpio pochamos la cebolla cortada en juliana gruesa. Cuando tome color, añadimos los dientes de ajo en rodajas también gruesas y ponemos los langostinos con la carne hacia abajo. Tan pronto como dicha carne se torne blanca por efecto del calor, les damos la vuelta y dejamos hacer sobre el caparazón, unos dos o tres minutos. Vertemos el brandy y flambeamos: el alcohol se consumirá en un suspiro. Ponemos tres cucharadas de harina, la tostamos un poquito y añadimos el vino blanco y el azafrán. Dejamos que se evapore el alcohol, retiramos del fuego y reservamos.
Nos vamos a la primera cazuela: vertemos un poco de caldo en el fondo y hacemos una cama con las patatas que tenemos reservadas. Repartimos por encima la cebolla, ponemos sobre ella los lomos de merluza y los langostinos, cubrimos con caldo, incorporamos los guisantes y cocinamos destapado a fuego medio unos diez minutos Cuando el caldo se vaya evaporando y espesando bajamos fuego y tapamos. Tiene que quedar con caldo, pero no en exceso.
Et voilá: merluza rica, barata y triunfadora.